“—¡Mira esto! —señaló
Elias sin hacer caso del esclavo—. Zumo de caña de azúcar. En efecto, un
arroyuelo de líquido marrón dorado fluía desde el molino hasta una cuba. Los
esclavos transportaban otras a una casa. —Lo hierven y luego llenan con él unas
sartenes planas. Cuando se seca, cristaliza y recibe el nombre de muscovado. Se
embarca a Inglaterra para que lo refinen y obtener con él cristales blancos de
azúcar. Y de la destilación del sirope de caña de azúcar (una especie de
producto secundario) obtenemos el ron” (Lark, Sarah. P:22. 2013).
El ron junto con el mezcal forma parte de mis
espirituosos favoritos, pero el día de hoy detendremos un poco la tahona
mezcalera para ocuparnos exclusivamente del destilado de la caña de azúcar.
Imagen:vixi.com |
El amargor más dulce:
En la isla de las mil fuentes la escritora Sarah
Lark nos lleva por un paseo dentro de los cañaverales inundados de esclavos en la
Jamaica colonial. Los africanos no tenían derecho a sufrir y mucho menos a
gozar de ese producto occidental llamado libertad. Pero el ron, mucho
antes de ser bebida de piratas y ocupar parte de la historia más cruenta de la
América colonial, fue elixir medicinal producto de la destilación primaria de
la caña de azúcar por los alquimistas árabes asentados en la península ibérica.
La historia por si sola de la caña de azúcar
nos merecería varios artículos. Sin embargo, les puedo adelantar que la ruta
seguida por ésta fue larga y extensa; descubierta
por los árabes conquistadores en el antiguo imperio Sasánida hacia el siglo VII,
derramó su dulzor en la región del Levante, Egipto y, a través del África del
norte cruzó el mediterráneo para llegar a Al-Alandalus por los puertos de Málaga
y Granada. Posteriormente fue el marinero genovés más famoso de la historia
quien le llevó al nuevo mundo durante sus primeros viajes en el alba del siglo
XV a la isla de la española y finalmente encontró su gloria en la isla de las
fuentes, Xaymaca; Jamaica para ser más
exactos.
Y sí, es correcto: no podríamos entender hoy
el ron, la miel de caña y el azúcar sin referirnos a al legado árabe sembrado
en Europa y cosechado por todo el occidente. Es más, no se podría entender el
mundo actual sin el conocimiento en gastronomía, ciencia y tecnología producido
por el mundo islámico medieval y esparcido durante siglos por el planeta tierra.
De Cuba a Barbados; de los piratas de Stevenson a las islas en el Golfo de Ernest Hemingway, Iremos desgranando poco a poco el fascinante mundo del ron pues hablar de este destilado nos tomaría varios días.
Comencemos:
Es el producto del resultado de destilar el
fermento de jugo de caña virgen o sus derivados tales como la melaza. No me
detendré mucho en este artículo en su proceso de elaboración, no obstante, les
dejo un video ilustrativo para conocerlo más de cerca:
Bien, ya sabemos “qué es el ron” y “cómo se
elabora”, pero ¿cuál compro? ¿cuáles son sus diferencias? ¿por qué el contraste
de precios entre cada una de las botellas?
Como todo buen explorador y con la finalidad
de animarte un poco más te comparto un breve mapa antes de tu partida por este
dulce mar.
Existen dos grandes categorías del ron: por
región y por materia prima.
1.
Por región: Esta clasificación nos dirá la procedencia
geográfica del ron y podemos encontrar 3 subcategorías:
Rones de origen hispano: Destilados elaborados en Cuba, Nicaragua, panamá,
Guatemala, México, República Dominicana, Colombia y otros países de habla
hispana.
Rones de origen británico: Fabricados en
Barbados, Bermuda, Guayana y otras islas anglófonas.
Rones agrícolas franceses: Cuidadosamente
elaborados en las Antillas francesas.
2.
Respecto a la
materia prima, ésta nos dirá si nuestro ron es producto de la primera o segunda
extracción del jugo de caña o del subproducto del proceso de la fabricación de
azúcar. De esto dependerá el perfil aromático de nuestro espirituoso y también tenemos
3 subcategorías:
Rones de miel de
caña virgen: Elaborados directamente
fermentando y destilando el jugo
procedente de la primera extracción de caña. Se caracterizan por tener un mayor
cuerpo y una gama aromática más amplia, de ahí que recomendamos probarlos solos
o con hielos.
Rones de melaza: Elaborados a partir del producto residual de la transformación del jugo
de caña en azúcar. Rones más frescos y generalmente de menor cuerpo, los
recomendamos principalmente para coctelería.
Imagen:dunixa.com |
Rones con agregados: Generalmente rones fabricados de melaza a los cuales se les añaden
complementos como sabores frutales o especias como clavo, vainilla y pimienta.
No te
preocupes, no es tan complejo como parece. En artículos subsecuentes te iré
llevando de la mano por cada categoría y veremos cómo éstas se entrelazan para
ofrecernos productos fantásticos y asombrosos.
Frutos secos,
canela, maple, especias… Marrón, caoba, ámbar, oro viejo… Colorea tu mundo y
anímate a salir del ron blanco para explorar este universo maravilloso y
descubrir aromas y sabores completamente distintos. ¡te vas a sorprender!